El Camino es un estudio de discipulado con propósito de 5 sesiones que familiariza a los discípulos con la manera en que Jesús llama, enseña, prepara y guía a sus seguidores. Al concentrarse en la travesía de los discípulos originales de Jesús, El Camino ayuda, tanto a los discípulos nuevos como a los más maduros, a recorrer los evangelios y a seguir a Jesús y sus métodos. Este recurso —que también es la continuación lógica de El Comienzo— puede usarse como producto autónomo y sirve no solo como resumen de la serie El Caminar del discípulo sino también como punto de partida para los seguidores de Cristo que deseen profundizar en su comprensión y práctica del discipulado. El Camino puede usarse en grupos de diverso tamaño, comenzando por el discipulado individual hasta grupos más grandes.
El estudio incluye una introducción al tema de la sesión semanal, opciones guiadas de oración y un enfoque bíblico con el texto y una explicación narrativa que dirige la reunión semanal. Cada semana también se incluyen preguntas para conducir el diálogo y ejercicios grupales a fin de reforzar los principales puntos de aprendizaje de cada tema. Todas las actividades de estudio individual y las que se realizan fuera del grupo se han elaborado para ayudar a los lectores a dar su próximo paso como discípulos de Cristo. Estas actividades opcionales incluyen, entre otras, planes de lectura, ejercicios de oración, estudio personal y escritura de un diario.
Las sesiones incluyen:
1. Definición de “discípulo”
2. Jesús llama a sus discípulos
3. Jesús enseña a sus discípulos
4. Jesús prepara a sus discípulos
5. Jesús envía a sus discípulos
Características:
· Formato de estudio bíblico, contenido y actividades creados y escritos por discipuladores activos.
· Ejercicios individuales a fin de brindar oportunidades para poner el discipulado en práctica.
· Un plan personal de estudio bíblico.
Beneficios:
· Examinar los cinco elementos esenciales del discipulado según el ministerio de Jesús. Facilitar la transformación mediante ejemplos a seguir y la práctica.
· Usarlo como “manual” para situaciones de discipulado individual o de dos a uno.
· Liderar con efectividad: requiere una preparación mínima al líder y permite que este dé el ejemplo de lo que significa ser discípulo.
· Iniciar un camino de discipulado con propósito para una persona o un grupo.
· Ayudar a quienes tienen dudas sobre la salvación.